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Las lesiones perinatales son lesiones físicas que se producen durante el parto y que pueden afectar al bebé y a la madre. Estas pueden producirse antes, durante o después del parto. Los errores médicos pueden provocar daños permanentes. Por lo tanto, los profesionales médicos, como médicos y enfermeros, deben cumplir con el estándar de cuidado correcto antes, durante y después del parto. Aunque algunas lesiones perinatales se deben a complicaciones naturales durante el partido, otras se producen debido a una negligencia médica. Si una persona cree que su hijo(a) ha sufrido lesiones perinatales debido a una mala praxis médica, es importante comunicarse con un abogado para evaluar la posibilidad de presentar una demanda. Si se tramita de manera correcta, una demanda puede brindar una indemnización monetaria que será necesaria para tratar a la persona que ha sufrido las lesiones. En el caso de un bebé con lesiones cerebrales u otras lesiones graves, el costo del tratamiento podría ser de millones de dólares durante la vida del bebé. Los médicos y los hospitales cuentan con un seguro contra mala praxis médica que cubre este tipo de situaciones.

Tipos de lesiones perinatales

Las lesiones perinatales las puede sufrir el bebé y la madre que da a luz. Las lesiones perinatales que sufren las madres se dividen en  

1. Lesiones en la zona perineal o vaginal, como rasgaduras y daños en los nervios de la zona perineal del cuerpo de la mujer.
2. Lesiones en el piso pélvico, que podrían ser rasgaduras y sobredilatación, a veces permanentes, de los músculos del útero, los intestinos y la vejiga.

Los bebés también podrían sufrir varias lesiones perinatales. Aunque no es una lista completa, algunos ejemplos son:

• Las lesiones extracraneales son las más comunes y consisten en lesiones en la cabeza. Algunos ejemplos son escoriaciones del pericráneo, cefalohematoma y hemorragia subgaleal.
• Las lesiones intracraneales consisten en hemorragias al interior o alrededor del cerebro, las que podrían ser bastante graves y provocar convulsiones. 
• Lesiones del plexo braquial; la parálisis de Erb es el tipo más común. La distocia de hombros es el mayor factor de riesgo identificado, donde el hombro del bebé queda atascado detrás del hueso púbico de la madre, y la tracción durante el parto provoca lesiones en el plexo braquial. 
• Las lesiones de la columna vertebral son inusuales, pero podrían ser extremadamente graves, ya que suelen ser permanentes y provocar parálisis.
• La asfixia perinatal se produce cuando hay una disminución en el flujo sanguíneo de los tejidos del bebé, que en los casos más graves, puede provocar problemas del desarrollo e incluso parálisis cerebral, que es una lesión permanente incurable. 

Cómo se producen las lesiones perinatales 

Estas lesiones pueden deberse a complicaciones naturales durante el parto. En “The Cerebral Palsy Guide” (Guía sobre las parálisis cerebrales), se explica que un retraso en el nacimiento, donde el parto dura más de 18 horas, es una de las causas más comunes de las lesiones perinatales. Durante un parto prolongado, el bebé podría recibir menos oxígeno o incluso nada de oxígeno. Esto podría causar una enfermedad denominada encefalopatía hipóxica-isquémica (EHI), también conocida como asfixia. Cuando un bebé no recibe oxígeno, las células cerebrales se debilitarán y morirán.  Además, los bebés que pesan más de 3,7 kg corren mayor riesgo de sufrir un parto difícil, al igual que aquellos que nacen en una posición anormal. Muchos casos de lesiones perinatales lamentablemente se deben a complicaciones conocidas que podrían surgir durante el parto. Sin embargo, en otras ocasiones, las lesiones podrían deberse a una mala praxis médica. 

De qué manera la falta de supervisión del bebé y de la madre podría provocar lesiones

Los médicos y los enfermeros están capacitados para ayudar a las madres a dar a luz y enfrentar las complicaciones que podrían surgir durante el parto. A veces, no respetan las prácticas establecidas, lo que podría causar lesiones perinatales. Cuando ocurre esto, los médicos saben que podrían ser demandados por mala praxis médica. Algunos ejemplos de errores que pueden cometerse durante el parto son:

Errores de monitoreo de la frecuencia cardíaca del feto

Esto es cuando el médico monitorea la frecuencia cardíaca del feto con equipos especiales durante el parto. Si la frecuencia cardíaca es muy alta, muy baja o irregular, el médico debe identificar y tratar la causa subyacente. Si el médico no reconoce las irregularidades o no las trata, el bebé podría sufrir lesiones permanentes, como parálisis cerebral.  

Errores de cesárea

Las cesáreas podrían ser necesarias cuando existen complicaciones con el parto tradicional. A veces, es posible que el médico no identifique la necesidad de realizar una cesárea. Si se hubiera realizado una cesárea, probablemente hubiera habido un mejor resultado. Otras veces, es posible que el médico no realice la cesárea de manera correcta o no realice el seguimiento necesario tras la operación. Como consecuencia, la madre puede sufrir infecciones y hemorragias, y el bebé podría sufrir lesiones permanentes. Un estudio reveló que los errores más comunes se relacionan con la anestesia, los vasos sanguíneos y problemas con la vejiga.

Errores de extracción

Un médico podría usar un instrumento especial como un extractor por vacío o fórceps para ayudar a sacar al bebé. Si se manipulan o utilizan de manera incorrecta, el bebé podría sufrir lesiones en la cabeza, el rostro y los nervios. Por ejemplo, el uso incorrecto de los fórceps podría provocar hemorragia subgaleal, que es una complicación inusual aunque posiblemente mortal en los recién nacidos. 

Errores epidurales 

Las mujeres que dan a luz podrían decidir recibir anestesia epidural, la que adormece la parte inferior del cuerpo. Algunos errores médicos podrían ser administrar demasiada anestesia, administrarla demasiado pronto o ignorar los signos de sufrimiento fetal. Los errores de anestesia pueden provocar parálisis o incluso la muerte. 

Administración errónea de la oxitocina

La oxitocina es un medicamento que induce el parto pero que es peligroso si se utiliza de manera incorrecta. La FDA ha emitido una advertencia de que la oxitocina podría conllevar riesgos graves o posiblemente mortales. Por lo tanto, los proveedores médicos deben tener muchísimo cuidado al administrarla. Se sugiere que solamente un proveedor médico con experiencia la administre, y que el paciente esté bajo la supervisión constante de personal capacitado que pueda lidiar con los posibles efectos secundarios.

Cuidado prenatal Aunque en general se considera que las lesiones perinatales se producen durante el parto, una reclamación por lesiones también podría ser viable si el bebé sufre lesiones a causa del cuidado prenatal del médico. Por ejemplo, si un médico o un farmacéutico recetaron un medicamento que le hizo daño al bebé, o si se debería haber recetado una vitamina o un fármaco determinado y no lo hicieron, es posible presentar una reclamación por mala praxis incluso si las lesiones se produjeron fuera del parto. 

Signos de que se produjeron las lesiones perinatales

Aunque algunos síntomas pueden manifestarse al poco tiempo después del parto, otros podrían tardar uno o dos años en aparecer. Las lesiones perinatales pueden identificarse según los síntomas que presente el bebé. Algunos ejemplos son:

• Letargo
• Inapetencia 
• Convulsiones
• Apnea 
• Decoloración de la piel
• Debilidad o parálisis en los brazos o las manos 
• Baja frecuencia cardíaca

Algunos ejemplos de los síntomas que tardan en manifestarse son:

• Retrasos en el desarrollo del habla 
• Discapacidades intelectuales
• Dificultades para caminar o gatear 
• Problemas de visión, audición y/o coordinación

Costo de las lesiones perinatales

El costo de estas lesiones varía según el tipo de lesión. En la “Guía sobre las parálisis cerebrales”, se indica que el costo del tratamiento de un niño que sufre de una parálisis cerebral puede superar $50,000 al año. El costo total de tratar las lesiones cumplirá un papel importante para evaluar el monto de la indemnización que puede reclamarse en la demanda. De acuerdo a Forbes, la indemnización promedio en este tipo de lesiones oscila entre $400,000 y $500,000, pero en algunos casos incluso se podrían recibir millones de dólares. Las enfermedades discapacitantes permanentes, como la parálisis cerebral, podrían ameritar una indemnización muchísimo mayor. La persona afectada puede reclamar una indemnización por daños económicos, no económicos y a veces punitivos. Algunos ejemplos son los siguientes:

Daños económicos 

• Costo de la cirugía, las terapias y los medicamentos necesarios para tratar las lesiones
• Gastos futuros asociados al tratamiento 
• Modificaciones en la casa, equipos y transporte necesarios para brindar comodidad y cuidado
• Pérdida de la capacidad de generar ingresos en el futuro del niño debido a lesiones permanentes
• Pérdida de los ingresos de los padres si tienen que dejar de trabajar para cuidar a su hijo(a) 

Daños no económicos 

• Dolor y sufrimiento de la madre y/o del niño 
• Angustia mental y sufrimiento de los padres

Daños punitivos

• Su objetivo es sancionar a la parte culpable y podrían ser sumamente elevados. En general, solamente se imponen en caso de que se hayan incumplido claramente los estándares de cuidado correctos relacionados con el parto. 

Plan de cuidado vitalicio 

Un plan de cuidado vitalicio podría cumplir un papel importante para determinar el monto indemnizatorio en un caso específico. Se trata de un plan que elaboran expertos médicos junto con un abogado para determinar el total de gastos previstos del tratamiento del niño. Los factores relevantes que se consideran son los tratamientos médicos como cirugías, medicamentos, terapias, educación, transporte y modificaciones en la casa para mejorar la accesibilidad, como rampas para sillas de ruedas y ascensores. 

Qué hacer si cree que se produjeron lesiones perinatales

Las lesiones perinatales pueden ser una experiencia traumática y, en algunas circunstancias, cambiarán la trayectoria de su vida y la de su hijo(a). Además del daño mental y emocional de estas lesiones para los padres y el niño, podría generar gastos extremos a la familia. Si las lesiones se deben a una posible mala praxis médica, es importante consultar con un abogado lo antes posible para determinar si existe una reclamación viable. Una demanda exitosa no arreglará todo, pero le ayudará muchísimo a la familia a cuidar al niño, a corto y a largo plazo. A la hora de buscar un abogado, le conviene alguien con experiencia en este tipo de casos que entienda la situación que atraviesa la familia y que trabaje con usted en cada paso del proceso. En Rosenblum Law, llevamos más de 50 años tramitando reclamaciones por mala praxis médica. Trabajamos con expertos médicos para respaldar las reclamaciones de nuestros clientes, y somos negociantes con experiencia a la hora de enfrentar a las aseguradoras. Entendemos el estrés que podría sentir su familia, y nos aseguraremos de que reciba la compensación correspondiente por el daño que le haya causado la mala praxis médica.  Nuestro bufete podrá ayudarle a entender sus opciones y proteger sus derechos como paciente. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para recibir una primera consulta.

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